Este album de Mike Oldfield sinceramente mi preferido me conmueve por su belleza y excelente trabajo melodico.
Aqui Mike se interna en las sonoridades de la musica celta y las percusiones africanas creando un excelente paisaje sonoro de corte epico sin perder la luz y mucho menos la experimentacion, a pesar de ser la mas sencilla de las composiciones del multinstrumentista ingles.
El album esta divido en 3 partes OMMADAWN partes 1 y 2 y ON HORSE BACK.
Aqui Mike se hace cargo de instrumentos como : Arpa, guitarras eléctricas, bajo acústico, guitarra acústica, bajo, guitarra de 12 cuerdas, guitarra clásica, Mandolín, Bodhran, Bazouki, Banjo, Spinet, piano de cola, órganos eléctricos, sintetizadores, Glockenspiel y assorted percussion, demostrando desde ya el cruze entre lo ancestral y lo nuevo, la parte 1 comienza con una introduccion de guitarra clasica q de alguna manera presenta la melodia de la obra acompañada de unos colchones de synthes imitando coros los cuales tras una escala descendente van construyendo una base.
El album se va desarrollando de esta manera y asi aparece la climatica guitarra electrica con ciertos aires de dramatismo hasta caer en un arpegio de synthes que van elevando la situacion.
Junto a una base de guitarra acustica esta base lleva a una especie de obertura mas orquestal con una melodia aflautada y de nuevo la excelente electrica de Oldfield que da paso a una parte mas folklorica a medio camino entre lo griego y lo celta.
la cual desencadena una especie de canon entre las mandolinas synthes que concluye con un ambiente de arpa.
Y nos lleva a una melodia mas minima,la cual nos lleva a una linea de cello que proprciona el bajo para la guitarra.
Aqui ya aparecen mayores elementos percusivos como los bodhran por detras del exquisito y ya mas extenso solo de guitarra armonizado en octavas llevandonos a la melodia principal con un aire mas dramatico esta vez que se acentua con el coro para caer en la tribalista melodia cantada
doblada ritmicamente con percusiones africanas.
La guitarra electrica y los synthes crean por debajo de esto unos compases mas adelante cierto dramatismo ambiental, el cual lleva a un orquestal crescendo lleno de dramatismo.
Y que destila cierto aire oriental sobre el final y con unos expresivos vibratos juntos a las voces destilan cierto aire de plegaria o lamento quiza unos de los momentos de mas tension en el disco
que concluye con unos ritmos de percusion y dan fianal a la parte 1.
Comienza la parte 2 con unos acordes de strings muy calidos y unas zumbantes guitarras por detras en un plan muy orquestal con ciertos rasgeos de guitarra clasica apoyando ritmicamente los acordes.
Los mismos van increscendo con un exquisito sinfonismo ambiental y unas campanas de corte muy epico que le dan cierto dramatismo hasta caer en un arpegio continuo de synthes q va desapareciendo y he aqui el momento cumbre del album el cual comienza con unos arpegios de mandolina sobre los cuales la guitarra construye unas bellisimas melodias de corte reflexivo
luego las electricas hacen piccicato y dan paso a la melodia con gaita hungara un momento cumbre del album sin duda hasta el alma mas fria se conmueve con este pasaje.
Los strings van creando un canon sobre la melodia al igual que la mandolina hasta caer en una barroca melodia de flauta whistle sobre unos arpegios de guitarra y synthes que nos llevan a una parte de redencion muy orquestal realizada con las campanas y que lugo cae en un pasaje de corte grecolatino afirmando el corte etnico ambiental y sobre el cual oldfield ejecuta un solo de electrica a medio camino entre el country el rock y lo clasico.
Como si su guitarra danzara al compas de los otros instrumentos.
Aqui finaliza la parte 2 y nos lleva a ON HORSE BACK, una especie de coda a mi entender de corte netamente inspirado en el folk music de irlanda y escocia.
Comienza con un recitado sobre un arpegio sobre el cual inmediatamente se presnta la melodia con coro y guitarra incluido.
Asi se va intercalando la estructura de la cancion afirmando ese aire de mensaje de redencion en el campo y la naturaleza,momento cumbre cuando al final cantan las angelicales voces de los niños de la "The Penrhos Kids".
En definitiva uno de los mejores albumes que he escuchado y el recomiendo sobremanera a los amantes de la musica q te hace reflexionar.
MUSICOS:
Mike Oldfield : Arpa, guitarras eléctricas, bajo acústico, guitarra acústica, bajo, guitarra de 12 cuerdas, guitarra clásica, Mandolín, Bodhran, Bazouki, Banjo, Spinet, piano de cola, órganos eléctricos, sintetizadores, Glockenspiel y assorted percussion.
En el disco también intervinieron:The Hereford city band - brassJabula (Julian Bahula, Ernest Mothle, Lucky Ranku y Eddie Tatane) - percusiones africanas. Clodagh Simmonds, Bridget St John y Sally Oldfield, voces.Terry Oldfield - Pan pipesPierre Moerlen - Tympani Leslie Penning - RecordersDavid Strange - CelloDon Blakeson - TrompetaPaddy Moloney - Uillean pipes'The Penrhos kids' (Jason, Abigail, Ivan and Briony Griffiths) - Voces en 'On Horseback'Herbie - Northumbrian bagpipesWilliam Murray - Percusión
LETRAS
OMMADAWN:
[Chorus]
Ab yul ann i dyad awten yab na log a toc na awdtaw may on
ommadawn egg kyowl
omma dawn egg kyowl
[Repeat Chorus] [Repeat Chorus] [Repeat Chorus]
[Repeat Chorus] [Repeat Chorus] [Repeat Chorus]
ON HORSE BACK:
I like beer, and I like cheese
I like the smell of a westerly breezeBut what
I like more than all of theseIs to be on horseback
ChorusHey and away we go
Through the grass, across the snow
Big brown beastie, big brown face
I'd rather be with you thanflying through space.
I like thunder, and I like rainAnd open fires,
and roaring flames.
But if the thunder's in my brain,
I'd like to be on horsebackSome like the city, some the noiseen
Some make chaos, and others, toys.
But if I was to have the choice,
I'd rather be on horseback.ChorusSome find it strange to be here,
On this small planet, and who knows where.
But when it's strange and full of fear,
It's nice to be on horseback.Some are short, and others tall,Some hit their heads against the wall.But it doesn't really matter at all,
When you happen to be on horseback.
ChorusSo if you you feel a little glum,
To Hergest Ridge you should come.
In summer, winter, rain or sun,
It's good to be on horseback.
ChorusChorusYou know,
I'd rather be on horseback.
1 comment:
HOLA AMIGOS, LES SALUDA CÉSAR MENDOZA.
Una vez escribí una reseña sobre este estupendo disco del progresivo francés histórico para La Caja de Música (http://www.dlsi.ua.es/~inesta/LCDM/Discos/clearlight_clearlightsymphony.html). Aquí lo transcribo a continuación.-
“ Los dos movimientos que conforman el repertorio duran casi 20 ¾ minutos. El primero de éstos comienza con convincentes acordes de piano, los cuales no demoran mucho en articularse en un motivo básico para las expansiones de dos jams sucesivos a través de los primeros 5 minuto y medio. La guitarra y el saxo aparecen para ornamentar de colores aleatorios el sonido del ensamble, el cual halla un referente más permanente en el sintetizador. El piano y el órgano se reparten los solos. A partir del sexto minuto el asunto pasa a una sección más plenamente jazzera, afín al sonido Cantebury en varios aspectos, antes de volver a un nuevo motivo de piano. Es justo en esta instancia que la guitarra de Hillage empieza a asumir un protagonismo esencial, aunque Hillage no se desborda en sus fraseos, los mantiene ligados a las pulsaciones sólidas de la sección rítmica y las capas de mellotron y sintetizador. En el minuto 12 emerge un caos alucinado, resuelto por el piano, desdoblado en dislocados arpegios y la retoma del motivo inicial. Más adelante tenemos un estupendo solo de saxo. Los últimos minutos están ocupados por una sección majestuosa en la que el mellotron coral asume un rol casi épico: el sonido paulatinamente atenuado de los arpegios de órgano se hacen sentir como una llama que se va apagando inexorablemente.
El segundo Movimiento comienza con una evocativa melodía elaborada sobriamente por la dupla de piano y mellotron. La aparición sucesiva de armonías de sintetizador y trompeta, ornamentos espaciales de sintetizador y sutiles escalas de guitarra elaboran una delicada arquitectura orquestal que va desde una candidez sinfónica introspectiva hasta una ambientación más intensa que nos recuerda extrañamente a un versión más etérea de Magma, para llegar a un caos inquietante y moderadamente chillón poco antes de llegar al quinto minuto, algo así como un batallón de fuerzas espirituales que busca retar a la menta a despertar a una dimensión diferente. El factor de una prácticamente inexistente sección rítmica permite que los trasfondos de teclado y las bases del persistente piano gocen de una mayor libertad en cuanto al timbre. Este segundo movimiento porta una aureola más patentemente mística que la precedente, pero no nos engañemos, no se trata de un anticipo de lo que luego habrá de llamarse “new age”. Elementos tales como el vilmente alucinado solo de guitarra del minuto 8 y la misteriosa sección étnica que emerge entre los 15’30” y 16’30” crean una efectiva tensión de contrastes frente a otros pasajes rebosantes de conmovedora belleza (mayormente dominados por el piano). Los últimos dos minutos llevan a un clímax onírico de alto vuelo, oportunamente sellado por un cierre cósmico.
“Clearlight Symphony” es un discazo, una obra maestra. En muchos aspectos, se puede afirmar que Verdeaux se puso un listón insuperable con este disco debut, pero a fin de cuentas, esta gema no es sino la primera de muchas que Clearlight habrá de aportar en el transcurso de los siguientes años para el forjamiento de la vertiente más abiertamente vanguardista de la experimentación progresiva francesa. ”
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